La científica Eugenia Cheng, que sufre de aerofobia, analizó el miedo a los aviones desde un punto de vista lógico. Y éstas son las conclusiones, publicadas en un artículo de The Wall Street Journal.
Yo tengo miedo a volar, especialmente a los despegues. Escucho el avión carreteando y a medida que el avión va tomando altura siento pánico.
La gente racional insiste en que eso no tiene sentido ya que la probabilidad de morir en un accidente aéreo es mucho menor a la posibilidad de morir en un accidente de auto. Las estadísticas lo respaldan. En 2016 murieron alrededor de 271 personas como consecuencia de accidentes aéreos en todo el mundo, comparado con 1.300.000 de personas fallecidas en accidentes automovilísticos.
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Estas estadísticas son una medida cruda –hay mucha más gente que viaja en auto, por supuesto, en contraposición con las millas realizadas por pasajero- pero igualmente existe una gran diferencia en cuanto a la seguridad. ¿Estoy siendo irracional? Como profesora de matemáticas, no me gusta la idea de ser ilógica, por lo que decidí encontrarle la explicación matemática a mi miedo. Encontré 3 principales componentes:
- El primero es la probabilidad “condicional”. Esta probabilidad de que algo suceda debido a que otra cosa ya sucedió. El riesgo de que yo muera en un accidente aéreo es bastante pequeño, pero la posibilidad de que muera debido a que ocurra un accidente aéreo es grande. Esto es diferente con un accidente de autos, debido a que hay un montón de accidentes no fatales de autos, de los que uno puede escapar. De hecho, hay más accidentes no fatales aéreos de los que suponemos, pero sólo tendemos a escuchar en las noticias sobre aquellos que fueron fatales.
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La parte que me da miedo es la idea de que básicamente en un accidente fatal se mueren todos: si uno muere, es muy probable que todos mueran, salvo algunas excepciones. Por lo que si ocurre un accidente fatal, la chance de que esto ocurra es cerca de 1. En el caso de los accidentes de autos, es difícil encontrar el mismo caso, ya que hay accidentes de autos en donde algunos mueren y otros sobreviven.
- El segundo componente de mi miedo involucra a las expectativas. En matemáticas, la expectativa de ganar en una situación es equivalente a lo que puedes mantenerte para ganar multiplicado por las probabilidades de ganar. En el gran premio del Powerball puede alcanzar los $ 300 millones (de dólares), pero las probabilidades de ganar son de 1 en 292 millones, por lo que desde el punto de vista de las matemáticas se puede esperar ganar alrededor de $ 1.
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Es similar lo que sucede con esperar perder. La idea de morir en un accidente aéreo es tan atemorizante para mí que la tasa que le pondría es de pérdida. Si se multiplica la pérdida infinita por la probabilidad de que esto ocurra, que es pequeña pero no es “cero”, la respuesta es igualmente infinita. De modo que mi expectativa de pérdida es infinita. No importa si tengo miedo o no.
- El tercero y último elemento es la tasa de cambio. Esto explica porqué tengo miedo en el despegue. Es un período muy corto en el que la probabilidad condicional de morir rápidamente aumenta de 0 a 1. Este cambio dramático me pone muy ansiosa. Lo mismo el aterrizaje, que es peligroso, estadísticamente, pero el riesgo está disminuyendo de 1 a 0, por lo que podría calmarme.
Al ayudarme a encontrar una explicación racional de mi miedo a volar, las matemáticas me ayudaron a sobrellevar este miedo. Me di cuenta que necesito concentrarme en la posibilidad absoluta y aprender a ignorar la tasa de cambio. La probabilidad absoluta de que muera en un accidente aéreo es más baja que el riesgo de morir mientras transcurre mi vida con los pies en la tierra.
También me di cuenta de una forma que tengo de prepararme al miedo del despegue al igual que enfrento el miedo de morir en mi vida normal. Sentarme en mi sofá tranquila y segura, escuchando varias veces una grabación de un jumbo tomando carrera para el despegue –hasta que asocié ese sonido más con mi sofá que con los aviones-.
Hay muchos casos en donde nuestros miedos son directamente contrarios a lo que sabemos estadísticamente sobre determinados eventos o actividades. Si el miedo se siente todavía como algo real, esto puede llevarnos a creer que la ciencia falló de algún modo. Encontré más productivo buscar una explicación lógica para el miedo, en lugar de enfrentar las emociones en contra de la lógica en la batalla en la que la lógica no puede ganar.
*Esto es una traducción de un artículo publicado en The Wall Street Journal.
La Dra. Cheng es científica residente en la Escuela del Instituto de Arte de Chicago. Su último libro “Más allá del infinito: una expedición a los límites externos de las matemáticas” será publicado en marzo por la editorial Basic Books.
Hola, realmente es siempre un alivio encontrarse con gente como uno, que sufre y re sufre al tener que viajar en avión, si pudieras enviarme unos tips o algo para soportar, en unos dias hago dos vuelos de 5 horas y algo cada uno, mi destino final new york que no conozco y el panico me esta afectando seriamente hasta el sueño. muchas gracias!!!
Hola como estan?, antes que nada quiero agradecerles y es necesario recalcar la importancia de sentirse comprendido.
Mi primer viaje fue este año, de Bs As a Sta Cruz de la Sierra, me tomé 1 rivotril arriba del avion por lo que pasé 2/3 de vuelo transitando 2 ataques de panico y 1 turbulencia ligera que, para mi fue eterna.
A mitad de año cancele el regreso por miedo pero decidi volver para pasar las fiestas con la flia y ver donde nos depara Dios el proximo destino con mi marido y mi nena de 4 años, que me dice mami respira profundo.. verguenza total pero a la vez muero de amor y me da un poco de fuerza.
Encontrar este blog me hace sentir contenida, y aunque voy a tomar una pastilla para dormir, estos dias previos de ansiedad extrema, creo que se hara mas llevadero. Besos!
Hola Lourdes! Es muy importante llegar al viaje lo más relajada posible. Lo de la turbulencia…la verdad es que a nadie le fascinan! A seguir viajando! ✈️
Hola, me da mucho miedo montarme en el avión porque le tengo miedo a creer que se puede caer, no me asusta el aterrizaje, ni la salida, es algo irracional, tal vez cuando tenía 12 años tuve una mala experiencia por una turbulencia muy fuerte que nos sacudió, he hecho viajes de media hora y para mi son eternos, me encantaría que en mi país (Venezuela) hubiese un curso o algo para ayudarme, pero aquí no existe nada al respecto y obviamente quiero subirme a un avión para hacer un viaje largo.
Me encanta su blog y la información que nos dan. Gracias.
Hola Yesendy! Las malas experiencias son determinantes para muchas personas; no para todas. Pero sería ideal que encontraras un curso en tu país para superar el miedo. Tal vez puedas hacer un curso a distancia. Próximamente publicaremos novedades! Te recuerdo que podés unirte a nuestra comunidad en Facebook http://www.facebook.com/miedoalosaviones Saludos.
Hola, por una mala experiencia le empecé a tomar temor a los aviones, cosa que antes eran nada para mí, me ayudan con tips para superarlo, gracias!
Hola Liz! Les pasa a muchas personas! Te invitamos a unirte a la comunidad en Facebook http://www.facebook.com/miedoalosaviones 🙂 Saludos
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Hola Carola, buen día
Antes que nada, agradecer el Blog, que me ha ayudado muchísimo con toda la información. Sufro ansiedad, ante cualquier viaje, pero en los aviones sufro ataques de pánico. Miedo al despegue, a la turbulencia y el hecho de estar encerrada tampoco es grato. Con ayuda de una medicación he podido volar (hace unos años tuve una experiencia que hizo que deje de volar por 10 años, igualmente nunca me gustó volar) Pero un día decidí que no iba a perderme ningún viaje más, por miedo.
En dos semanas tengo un vuelo, es corto (3hs) y estoy leyendo y mirando videos de todo tipo. Ojalá pueda soportar el viaje, me llevo de todo para estar entretenida (radio, libro, cuadernos, cosas que me hagan reir).
Una vez más, gracias, me siento acompañada y entendida por sobre todo.
Saludos!
Hola Celeste! Qué bueno que nos encontraste y ojalá tengas un excelente viaje. Saludos. Carola.
Tengo miedo a volar.Ayudenme!!No tengo miedo en el despegue ni aterrizaje.Él estar encerrado y que se mueva el avión durante el viaje ése es mi problema.
Hola Susana! Cómo estás? Te mandamos un correo a tu email con algunos tips e información. Saludos.
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Carola, muy buen blog, felicitaciones.
La verdad, estoy pensando seriamente en hacer algún tipo de curso porque viajar me encanta pero subirme a ese mastodonte me intimida demasiado. He volado unas pocas veces, y sobre todo mis últimos vuelos del pasado enero a El Calafate fueron súper tranquilos, pero así y todo no dejaron de ser una tortura. Las manos sudorosas, el quedarme recto como estatua en el asiento, etc. Por suerte nos pusimos las pilas con mi mujer y -Alplax mediante- pudimos mantener la calma sobre todo para no transmitirle el temor a nuestro hijo de 6 años, de quien envidié su inocente tranquilidad: él viajó con las piernas cruzadas lo más pancho del lado de la ventana. Mi mayor temor siempre es el despegue, y de la previa ni hablar. Curiosamente, no tanto la turbulencia.
Lo cual es una pena, porque todo lo relacionado con la aeronáutica me parece interesantísimo, casi apasionante, y últimamente he estado leyendo bastante sobre el tema (no precisamente notas de corte sensacionalista), ya que dicen que una de las cosas que más ayudan a un fóbico es la información. Otra cosa que planeo en breve y que me recomendaron es plane spotting, que dicen que ayuda a familiarizarse con los aparatos y las cercanías del aeropuerto.
Mi mejor vuelo, por lejos, fue un Madrid-BsAs en el cual de tan cansado que estaba y de tantas ganas de llegar para contar (había estado un mes en Europa de mochilero y solo), apenas levantaron los plásticos de la comida, que me tomé dos cervezas y me planché… cuando desperté estaba en maniobras de aproximación. ¡Eso sí que es viajar bien!
Un abrazo, y voy a entrar seguido aquí.
Eduardo
Hola Eduardo, pero por lo que contás, casi estás para pilotear un avión 🙂 No hay como saber de los aviones y la verdad, a mí también me fascinan. Veo los documentales de aeropuertos (no de accidentes) y todos los procesos están tan pautados y controlados, que eso me ayuda a tener más confianza. ¡Te esperamos por acá y nada más gratificante como padre que ver que tu hijo vuela tan pancho! 🙂 Saludos y gracias por escribir